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La Secretaría de Energía oficializó un programa que tendrá como beneficiados a más de cinco mil clubes y otros tantos que se pueden sumar por el programa Hogar.
La noticia que surgió el 19 de octubre de la creación del Programa Gas Solidario por parte de la Secretaría de Energía de la Nación fue la primera gran noticia para el conjunto importante de los Clubes de Barrio del país,
Hubo -y hay- parches momentáneos que hicieron mejorar la situación con relación a los cuatro años del gobierno neoliberal de Mauricio Macri, pero la tan necesaria tarifa de gas se oficializó hace diez días y el gobierno del Frente de Todos empezó a pagar las deudas que tenía para con las miles de instituciones otorgándoles un 60% de descuento en las tarifas de gas de red y el mismo descuento a aquellos que compran garrafas a través del programa Hogar articulado por Anses.
La noticia resultó sorpresiva para propios y extraños, aunque era uno de los puntos en los que trabajaba Darío Martínez. La llegada de Guillermo Usandivaras y un equipo de trabajo con fuertes bases ligadas a los clubes, fue el empujón necesario para el feliz desenlace.
Son cinco mil los clubes beneficiados aunque hay miles más que están dentro de la órbita del programa Hogar que no figuran como clubes sino anotados bajo cuit o cuil personal y también reciben el beneficio.
El descuento será automático, es decir que aquellas instituciones beneficiadas verán en sus próximas facturas el descuento, otra buena noticia ya que las instituciones muchas veces se pierden en trámites burocráticos y en los que terminan desistiendo.
El derecho es para una parte importante del universo de Clubes. Es por ésto que resultó llamativo que distintas organizaciones que nuclean a los clubes hicieran silencio y no se acoplen a la noticia. Ni en micrófonos ni en redes enaltecieron el nuevo derecho y eso que generalmente mantienen una dinámica de agradecimiento constante para con el gobierno nacional de Alberto Fernández. Cuanto menos raro.
La necesidad de que deportes mueva el avispero
Pese a que Matías Lammens, ministro de Turismo y Deportes, fue parte del comunicado oficial no hubo demasiado acompañamiento por parte de su estructura que debería velar por las miles de instituciones.
De hecho, en diversas oportunidades tanto la Secretaría como el Ministerio no contestaron los llamados o correos electrónicos pidiendo celeridad para los listados necesarios para contar más información y que el programa llegue a más beneficiarios.
Es un punto en el ponen el ojo distintos ministerios y sobre todo en esta situación, tras aquellas reuniones entre la cartera de Energía y Lammens y Arrondo se notó falta de coordinación o bien, falta de celeridad por parte de los equipos técnicos que en principio deberían pensar en transformar el deporte nacional.
Y es un punto que hay que tener en cuenta, porque a la hora de pensar en una reglamentación plena de la ley Nacional de Clubes de Barrio y a a dos años de iniciado el gobierno y con dos años por delante, sabemos que ésto, es muy factible que no ocurra.
El problema histórico de las facturas eléctricas
La Ley N° 23.696 de 1989 y su Decreto Reglamentario N° 1.105, del mismo año dispuso la emergencia administrativa de la prestación de los servicios públicos. En lo atinente al sector eléctrico fijó el ordenamiento institucional empresario en una Empresa Federal de Energía Eléctrica (EFEE) que involucraba a Agua y Energía Eléctrica S. A., Hidronor S. A. y la generación de energía de otras empresas nacionales.
En el año 1992 y ante la falta de resultados concretos se sancionó la Ley N° 24.065 y su Decreto Reglamentario N° 1.398, estableciendo el nuevo Marco Regulatorio Eléctrico y declarando sujeta a privatización total la actividad de generación y transporte a cargo de Agua y Energía Eléctrica S.A., Segba e Hidronor S.A., las que se regirán por la Ley N° 23.696 del año 1989.
Es un dato insoslayable, porque esa privatización impulsada por el gobierno de Carlos Menem hizo que a la hora de pensar en una factura se divida en la generación, transporte y distribución y que además el país que antes de la reforma del sistema eléctrico contaba con 4 empresas nacionales y dos hidroeléctricas binacionales que garantizaban el 84% de la generación de energía del país y que eran propietarias del 100% del transporte sufrieran una desregulación total.
Por eso, es que hoy resulta por demás de complejo pensar en una tarifa eléctrica por y para los clubes. De hecho y pese a que el deseo está, hoy debería hablarse con cada una de las provincias que cuentan con sus marcos regulatorios, algunos con empresas estatales, otras privatizadas, otros con cooperativas, otras con un híbrido y cada una con sus intereses y formas de trabajo.
Solo Santa Fé y Entre Ríos cuentan con una tarifa que beneficia a las diversas entidades que cumplen un rol social clave en cada una de sus comunidades.
Habrá que esperar entonces para una factura de energía eléctrica con descuentos importantes para los clubes. hoy solamente podrán conformarse con que no les corten el servicio o quizás con la condonación de deudas que al estado no le representaría una salida de dinero exorbitante y que es necesaria luego de que Juan José Aranguren rompa todo durante su mandato.
Para el agua, primero articular con la dirección de clubes.
En materia de facturas de agua, pese a que miles de clubes aún no están enterados, el derecho ya se concretó. Para acceder al beneficio, la dinámica es distinta. Primero hay que registrarse en el sistema de Clubes Argentinos y luego, una vez que se tiene un usuario, pueden computar para el descuento en la tarifa de agua.
Es así que según la dirección de Clubes «la iniciativa persigue el objetivo de fortalecer el rol social de las entidades, considerando la importancia que tendrán en el contexto de la pospandemia. Los clubes pueden acceder al beneficio a través del Registro Nacional de Clubes de Barrio y Pueblo. Para hacerlo, deberán completar los datos requeridos en el Sistema de Gestión de Clubes. Una vez efectuado, el trámite se realiza automáticamente a través de una gestión articulada con el ERAS y AySA».
De todos modos la problemática con las facturas de agua es otra. Primero, las deudas que se sostienen. Clubes con 2 o 3 millones de pesos en deudas que necesitan imperiosamente una reestructuración o bien una condonación y por otra parte que el costo se determina por metro cuadrado, una medida que a las instituciones les resulta contraproducente.
Los otros detalles de la problemática son dos. Una es que miles de clubes ni siquiera están enterados de que pueden tener un descuento importante en las facturas. Otra es que los clubes deben renovar el beneficio año a año.
Con sus aciertos y errores, el gobierno de Alberto Fernández demostró ser bastante mejor que el que comandó Macri en sus cuatro años.
En ese sentido la creación del programa Gas Solidario se transforma en el primer gran derecho para los clubes. Falta ahora, mayor tracción por parte de deportes y que la política deportiva cuente con una estructura que le solucione los problemas y no que los meta en trámites burocráticos y sin sentido.
